La nueva NZXT H3 Flow anunciada recientemente en la Computex 2025 es la apuesta de la compañía para volver a conquistar el terreno de las placas base micro-ATX y mini-ATX. Un nuevo diseño que apuesta por el rendimiento térmico e inspirado en la reciente NZXT H5 Flow. Todo esto en un formato compacto, pensado para aquellos que no quieren un chasis que ocupe mucho espacio, pero que tenga un rendimiento perfecto. Así que ya sabes, continúa leyendo nuestro análisis completo a continuación.
INFORMACIÓN DEL NZXT H3 FLOW
Con la NZXT H3 Flow, se vuelve al terreno micro y mini con una propuesta que prioriza el flujo de aire sin comprometer la compatibilidad ni la experiencia de montaje. A diferencia de otras cajas que apuestan por reducir tamaño a toda costa, aquí se busca un equilibrio: ofrecer una torre compacta, sí, pero capaz de albergar los últimos componentes del mercado con soltura.
El diseño se inspira especialmente en la H5 Flow, adoptando un enfoque de refrigeración agresiva. Los paneles de malla metálica en el frontal y la parte superior permiten una ventilación efectiva, mientras que la cubierta ventilada de la fuente de alimentación mejora la entrada de aire desde la base. Todo el chasis está construido en acero SGCC con panel lateral de vidrio templado, que suma solidez y estética limpia.

Rendimiento térmico y compatibilidad
El flujo de aire es uno de los puntos fuertes de esta caja. Ya que soporta hasta siete ventiladores en total, teniendo preinstalado un ventilador F120Q en la parte trasera para asegurar un buen flujo de aire desde el primer momento. En configuraciones líquidas, permite radiadores de hasta 280 mm en el frontal y hasta 240 mm en la parte superior, cubriendo sin problemas la mayoría de configuraciones avanzadas.
En cuanto a espacio interno, la NZXT H3 Flow no se queda corta. Admite tarjetas gráficas de hasta 377 mm sin ventiladores frontales, y hasta 317 mm si se monta un radiador con ventiladores en esa zona. El espacio para disipadores de CPU llega hasta 170 mm de altura, y para fuentes de alimentación hay margen hasta los 185 mm. Además, incluye soporte para placas base con conectores traseros (como BTF o Project Zero), lo que permite una estética más limpia y sin cables a la vista.

Conectividad y almacenamiento
Como es habitual en cualquier chasis, el frontal de la NZXT H3 Flow dispone de un puerto USB 3.2 Tipo A y uno Tipo C (Gen2x2), además del botón de encendido. Para el almacenamiento interno, se permite montar hasta tres unidades de 2.5” y una de 3.5”, suficiente para equipos más actuales, ya que en la actualidad es habitual ver menos discos duros de 3.5”.
La gestión del cableado también está bien pensada, hay espacio dedicado de hasta 31.5 mm para enrutar cables, junto con canales integrados y puntos de sujeción para mantener todo limpio y ordenado.
EMBALAJE Y CONTENIDO
Como es habitual, examinaremos el contenido del embalaje y lo que encontraremos en su interior. En esta ocasión el embalaje está elaborado en una caja muy discreta de cartón rígido con un boceto del diseño del chasis tanto en el frontal de la caja como en la parte opuesta. Por último, cada uno de los laterales cuenta con las especificaciones del producto en varios idiomas.
En el interior de la caja encontrarás la NZXT H3 Flow, una caja con tornillos para el montaje y varias unidades de bridas para el cableado. Además, del manual de instrucciones de montaje.

DISEÑO DE LA NZXT H3 FLOW
El aspecto estético de la nueva NZXT H3 Flow destaca por mantener esa esencia minimalista típica de la compañía, con unas líneas limpias y unos paneles bien integrados. La nueva caja está disponible en color blanco con un vidrio templado claro y en color negro con el vidrio templado tintado, ideal para todo tipo de configuraciones.
El frontal y la parte superior están compuestos por paneles de malla metálica de alta densidad, diseñados no solo para maximizar la entrada de aire, sino también para actuar como filtros de polvo sin sacrificar rendimiento. En cambio, el panel lateral de vidrio templado da visibilidad total al interior del equipo, ideal para ver un interior sin cables gracias al soporte para placas con conectores traseros. Todos estos son accesibles
En cuanto a sus dimensiones, son de 490 x 302 x 475 milímetros (alto x ancho x profundidad), siendo un poco más compacta con relación a otros modelos de NZXT. Todo esto en un peso neto de 5,017 kilogramos.
NUESTRA OPINIÓN
Una vez más, estamos ante un producto de NZXT que destaca especialmente por su diseño, tanto en el exterior como en el interior. En el caso de su interior, es totalmente limpio, espacioso y cuenta con una gestión de cables ideal. Otro detalle importante es que es totalmente compatible con las nuevas placas base back-connect, lo que te permite realizar una instalación mucho más limpia. Esto último es importante, ya que la propia caja tiene un flujo de aire ideal. También tengo que destacar que es totalmente compatible con tarjetas gráficas de nueva generación y con sistemas de refrigeración AIO, lo que la hace ideal para utilizar con los nuevos NZXT Kraken Plus 240 RGB.
A nivel de construcción, sus materiales son de buena calidad, con paneles de malla y un lateral completo de vidrio templado. Además, podrás escoger entre color blanco o negro, según el estilo que busques. Por el precio que tiene, ofrece una combinación muy equilibrada entre estética, funcionalidad y rendimiento térmico.
Lo que menos me ha gustado es que solo incluye el ventilador trasero, ya que podría haber incluido los ventiladores frontales.
En conclusión, la NZXT H3 Flow está recomendada y recibe la medalla de diamante por ofrecer lo que promete, un diseño reducido con un flujo de aire perfecto. Es totalmente compatible con hardware de nueva generación, aunque solo dispone de un ventilador de serie. Sin duda, es perfecta para un equipo compacto y es difícil pedirle más por lo que cuesta.


Por último, dar las gracias a NZXT España por cedernos una unidad de NZXT H3 Flow.