A finales de 2024, el estudio Cyborn lanzó en Meta Quest 3 el videojuego Wall Town Wonders. El título aprovecha de muy buena forma la realidad mixta y “se genera” en las paredes de tu casa. Ahora, esta obra ha llegado a PC VR y PS VR2 (versión que he jugado). Este salto elimina la sorpresa de la RM, pero resuelve bien la papeleta en realidad virtual. Análisis de Wall Town Wonders (PS VR2).
DESARROLLADOR | EDITOR | PLATAFORMAS | FECHA DE LANZAMIENTO |
---|---|---|---|
Cyborn B.V. | Cyborn B.V. | PC VR | PS VR2 | 7 de mayo de 2025 |
Ciudades en la pared de lugares
Me parece acertado que Cyborn quiera aprovechar al máximo su creación sacándolo en PC y PlayStation 5. Las cosas en el mundo de los videojuegos de VR no son boyantes, así que es mejor lanzar el título en todos los lugares que uno pueda, si los recursos dan para ello. Pero también es verdad que el gran atractivo de Wall Town Wonders es la realidad mixta y eso desaparece en PC VR y PS VR2.
Aunque no he jugado a la versión de Meta Quest, es fácil entender que debía ser mucho más espectacular con ese enfoque, porque esta versión (que podríamos catalogar como pura de realidad virtual) me ha dejado algo frío. Es un juego curioso, con unos gráficos muy chulos, pero que adolece de profundidad en sus sistemas y eso hace que se haga algo aburrido, más allá del choque inicial.
Wall Town Wonders es un videojuego de estrategia, gestión y simulación de vida con mecánicas casuales. Lo curioso es que la ciudad que levantas desde cero la construyes en la pared de diferentes habitaciones y lugares, porque los habitantes son diminutos, a una escala que te recordará a películas clásicas como “Cariño, he encogido a los niños”.
Mola un montón, la verdad, porque ver a esas personas tan pequeñas hacer su vida y evolucionar conforme crece la ciudad es realmente interesante. Puedes elegir tres escenarios para crear tu comunidad: un ático, una habitación lujosa y una terraza abierta en un lugar de ensueño. Hubiera estado bien que tuviera algún emplazamiento más, pero los tres son buenos.
De hecho, lo están porque gráficamente es absolutamente precioso. Aunque le falta algo de resolución para ser perfecto, la iluminación es fantástica y las texturas tienen una gran calidad. Es un estilo muy limpio, que busca ser realista. Es una gozada admirarlo y quiero destacar por encima de todo las animaciones de los habitantes, que me han parecido realmente buenas.

Desarrollando la ciudad
La jugabilidad es sencilla de entender, aunque el ritmo de avance es muy lento y a veces falta algo de información clara sobre qué hacer. Tu objetivo, básicamente, es desarrollar la ciudad con nuevos edificios y servicios, vigilando en todo momento los recursos disponibles. Vamos, que es un juego de estrategia y gestión de construcción de ciudades, pero muy accesible.
Lo interesante es que puedes participar en minijuegos para ayudar a los lugareños a cumplir sus objetivos e incluso farmear algunos recursos. Patinaje, recolección de semillas, viajes a la mina… Hay un buen número de actividades, pero se hacen algo tediosas. El control no es espectacular que digamos y acaban siendo bastante repetitivas. No encajan en el gameplay tan bien como deberían.
El gran problema es que su diseño de niveles y desarrollo parece más el de un juego de móvil pochillo que uno realmente trabajado e interesante. No es el apartado más acertado del título y es necesario que te tomes con paciencia el avance, pero si asumes sus problemillas, tienes aquí un juego cozy para echar el rato tranquilamente. No tiene mucha competencia en VR, la verdad.
Por último, sí quiero decirte que la comodidad es mejorable. Aunque te mueves por el escenario con el stick y puedes agacharte virtualmente, los edificios más bajos son inaccesibles si no te agachas también físicamente. Espero que esto se ajuste de alguna manera, pero es un poco molesto. No es algo que tengas que hacer todo el rato ni nada por el estilo, pero sucede.
Conclusiones
Wall Town Wonders deja atrás la realidad mixta en PS VR2 y pierde algo de su magia, pero es una experiencia cozy y simpática, con un apartado artístico notable y buenas animaciones, pero lastra por su falta de profundidad, su ritmo lento y unos minijuegos que no terminan de encajar. Un título curioso y agradable para ratos tranquilos, aunque con más potencial del que finalmente logra desplegar.
Por último, dar las gracias a CYBORN por cedernos una copia de Wall Town Wonders.