Ghostrunner, impresiones de la demo

Por José Miguel Rodríguez Ros Artículos Consolas Juegos PC PlayStation 4 Xbox One 6 minutos de lectura

Hemos probado Ghostrunner, el slasher en primera persona y con ambientación cyberpunk de One More Level, 3D Realms y Slipgate Ironworks. La demo, disponible en Steam hasta el 13 de mayo, nos permite probar el juego y vislumbrar de forma muy escueta qué nos ofrecerá. El título, con clara influencia de Mirror’s Edge y, en cierta manera, de Ruiner, es frenético y complicado. Tras estas dosis de plataformeo y sangre en Ghostrunner, os traemos nuestras impresiones de la demo.

Futuro distópico

Como hemos comentado, Ghostrunner es un slasher en primera persona. Para aquellos que no sepáis de qué va este género, éste se basa lanzar al jugador contra un grupo de personas y en un entorno que generalmente está diseñado para ser competitivo. También hace hincapié, normalmente, en la soledad del usuario. Ghostrunner cumple esta premisa en líneas generales, con la única concesión de una voz misteriosa que parece estar de nuestro lado.

El juego está ambientado en un entorno cyberpunk y transcurre en una megaestructura futurista. Según la propia información  del título, nuestro objetivo será subir a la Torre Dharma, “el último refugio de la humanidad después de un cataclismo que acaba con el mundo”. Parece que ahí estará la clave para salvar el mundo.

Las calles de esta torre-ciudad están llenas de violencia y de enemigos que nos disparan en cuanto detectan nuestra presencia. Mara, la maestra de llaves, gobierna la ciudad de forma contundente y tendremos que vencerla en el juego completo.

La demo no deja muy claro ninguno de estos aspectos de la historia que hemos comentado, todo sea dicho. Está muy pensada para crearnos misterio y suspense, pero la realidad es que el relato crea cierta indiferencia. No hay nada especial en los diálogos que vemos.

Saltos y espadazos

Pero, ¿cómo se juega? En la fase que disfrutamos en la demo de Ghostrunner (imaginamos que en la versión final será así también) tenemos que avanzar por un escenario lineal y acabar con los enemigos. Para ello, nuestro personaje puede realizar parkour (andar por las paredes, saltos espectaculares y deslizamientos por el suelo). También tenemos a nuestra disposición ciertos poderes, como una especie de tiempo bala (sirve para saltar más lejos y esquivar los disparos) y un extraño gancho para colgarnos de ciertas estructuras. La combinación del plataformeo es divertida, aunque no hemos visto nada espectacular en la demo. El título recuerda una barbaridad a Mirror’s Edge, la exitosa franquicia de EA.

Los enemigos están repartidos por el escenario como si de piezas de ajedrez se tratasen y, en cuanto nos ven, nos disparan. Son obstáculos puesto en un punto, sin más. Un balazo y estamos muertos, lo que hará que reempecemos esa fase desde el último punto de control. La verdad es que el conjunto carece de mucho sentido. Avanzamos por una parte del escenario, rebanamos a nuestros enemigos (la espada que llevamos corta que da gusto) y a la siguiente zona. Parece un título pensado para speedrunners y jugadores que quieran probar su habilidad.

Ghostrunner, para amantes de los retos

Y, precisamente por esto último, no entendemos que no haya algún sistema de puntuación que mida tu habilidad. Le falta ese aspecto competitivo del género. Seguro que muchos usuarios se pueden ver atraídos por el hecho de mejorar las marcas en cada zona o fase completa, ya que el juego es difícil. Los enemigos nos eliminan con cierta facilidad y hacerse al juego merece nuestra atención. Hay que estudiar los escenarios, el camino más rápido y más seguro para acabar con los npcs. Además, aniquilarlos es obligatorio, es la forma de pasar de zona. De hecho, la demo de Ghostrunner os durará poco o mucho dependiendo de vuestra habilidad. Nosotros tardamos 24 minutos, pero seguro que otras personas la pueden despachar en unos diez o quince.

El juego recuerda también al Ruiner, ya no solo por la ambientación, sino por el diseño. Tenemos que acabar con los enemigos para avanzar. Es cierto que ambos títulos son radicalmente diferentes en su jugabilidad, pero mantienen ciertas similitudes. Ruiner, en cambio, sí tiene esa puntuación de la que hablamos al acabar una fase. Imaginamos que efectivamente esto estará en el juego final, pero solo es nuestro deseo en realidad. Nos sorprendería su ausencia.

Más dudas que certezas

La demo de Ghostrunner deja una sensación agridulce. Parece que estamos ante un juego de nicho, enfocado a speedrunners y personas que les guste mejorar sus marcas. Esto último, aún así, no tendrá mucho sentido hasta que no incluyan algún tipo de puntuación, algo que consideramos fundamental en un título así.

La realidad es que la demo parece no demostrar en absoluto el potencial del juego y sabe a poco. Veremos, cuando salga durante 2020 para Steam, PS4 y Xbox One, si esto es así o no. Todo da la impresión de estar a medias y sin demasiada gracia, y por eso consideramos que probablemente la demo no le haga justicia a la versión final. Lo descubriremos en los próximos meses.

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Periodista especializado en videojuegos y especialista en marketing digital. Los videojuegos me enamoraron siendo un niño, he trabajado con ellos a tiempo completo y ahora sigo en varios medios colaborando todo lo que puedo. Juego a todo en cualquier parte, sin importar la plataforma.
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