V Rising me tiene completamente enganchado, como un vampiro a un charco de sangre

Por José Miguel Rodríguez Ros Avances 12 minutos de lectura

A no ser que hayáis estado encerrados en un búnker sin conexión a internet, es bastante probable que en los últimos días hayáis oído hablar mucho de V Rising. O mejor: quizá sois uno de los miles de jugadores que se han atrevido con el nuevo éxito de Steam, un juego de supervivencia y vampiros que te chupa la sangre (y el tiempo). He jugado ya unas cuantas horas y os cuento mis impresiones.

La primera vez que oí hablar de V Rising, el nuevo juego de Stunlock Studios, fue en septiembre de 2021 y en aquel momento me tocó hacer una noticia sobre el título. Ya en ese instante percibí que podíamos estar ante un videojuego muy interesante, porque la propuesta era atrevida, variada y ambiciosa. El juego, que se ha lanzado en acceso anticipado (aunque no lo parezca en muchos momentos), ha cumplido con creces lo prometido y se ha convertido en un fenómeno de masas en PC.

V Rising es un videojuego de supervivencia y un Action RPG, con claras influencias de Diablo, pero también con tintes de juegos como Valheim, Rust o incluso Fortnite (la forma de farmear recursos me recuerda mucho al juego de Epic Games, aunque la comparación pueda parecer extraña). A todo esto, que ya suena bien, le sumas el factor diferenciador: encarnamos a un vampiro, y eso le da un carácter único.

Sobrevivir como un vampiro, una nueva experiencia

En V Rising, nuestro objetivo es engrandecer de nuevo a la especie de vampiros, pero esto no será fácil. Comenzamos nuestro viaje sin nada y tenemos que recolectar recursos de todo tipo para poder crear armas, vestimenta, objetos varios y uno de los grandes atractivos del juego, nuestro castillo. De esta forma, poco a poco, tenemos que ir sobreviviendo al entorno y desarrollar nuestro imperio vampírico.

V Rising
¡Es hora de despertar de un largo sueño!

Entre los detalles que cambian la experiencia respecto a otros juegos está, sin duda, nuestra condición de vampiro, que nos obligará a tener en cuenta factores que no nos suelen preocupar en otros juegos. El sol nos dañará (y no poco), tendremos que dormir en ataúdes, beber sangre para tener energía y mejorar como vampiros para obtener nuevas habilidades y ataques. Este hecho cambia la experiencia totalmente, porque nos hará tener en cuenta nuevos factores para sobrevivir.

El hecho de que, por ejemplo, durante el día nos sea muy difícil trabajar porque el sol nos restará vida, nos obliga a desarrollar nuestro castillo lo más rápido posible para, por lo menos, estar a salvo y poder craftear o gestionar algunas cosas durante el día protegidos con sombra. Al principio, el sol es un quebradero de cabeza y salir de expedición es jugársela, porque como no haya buenas sombras donde cubrir a nuestro querido personaje, el desenlace puede ser fatal.

En nuestros viajes nos cruzamos con bestias, NPCs, no muertos, animales y un sinfín de criaturas que hacen que cualquier rincón esconda un peligro. Por ejemplo, cuando fui a matar al primer jefe (que podemos rastrear gracias a una construcción de nuestro castillo), me encontré con que un NPC estaba peleando contra él. Intenté aprovecharme de la situación, pero el combate rápidamente se convirtió en una pesadilla para mí: pasé a ser la presa de ambos y morí.

V Rising
No te olvides de chupar toda la sangre posible para conseguir habilidades pasivas de los aldeanos, trabajadores, soldados…

Es precisamente en estas cosas donde el juego brilla más, sinceramente; en la propia experiencia y en los secretos que guarda. El videojuego no innova demasiado, no revoluciona el género, pero todos los elementos de supervivencia los enlaza de una forma magistral y todo funciona. Además, el componente RPG que tiene, con subida de nivel por equipamiento y una exploración muy satisfactoria (que nos hará encontrar asentamientos, ciudades y más sorpresas), le da un toque que redondea la fórmula.

Pero como decía, aunque V Rising es realmente bueno en todo eso, yo me quedo con la experiencia que supone jugarlo. Hay que planificar con cabeza nuestra supervivencia y, por ejemplo, se hacen muy necesarias las esencias de sangre, un objeto que obtenemos al acabar con enemigos (no con todos, porque los no muertos no dan esta esencia) y que sirve para alimentar el corazón de nuestro castillo, que es como la base que hace que todo funcione.

V Rising
Construye y personaliza tu propio castillo con una gran variedad de elementos estéticos y utilidades para mejorar tus habilidades

De hecho, si el corazón del castillo no está bien alimentado por esencias, el drama se cernirá sobre nosotros. Las máquinas de refinado de materiales no funcionan sin este “combustible”, pero lo peor es que si no tenemos suficientes esencias, nuestro castillo entra en un estado de ruina en el que queda inútil. Lo peor es que en ese momento, cualquier jugador puede destruir tus construcciones, ya que la protección vampírica de tu territorio desaparece. Esta mecánica está muy inspirada en Rust y la toleraréis bien si habéis jugado bastante a ese título; para mí ha sido un poco difícil lidiar con ello y no me termina de gustar.

Y esto es algo muy personal, simplemente, que no valoro como negativo desde un punto de vista periodístico, pero mi experiencia ha sido complicada con este uso tan obligatorio de las esencias. Por ejemplo, yo no he podido jugar durante estos días de forma muy seguida y he dejado bastante horas entre partida y partida, porque mis obligaciones laborales me lo impedían. Esto ha hecho que mi castillo haya entrado en deterioro en varias ocasiones.

Lo peor de todo fue el día que entré al servidor PvE en el que estaba y vi que no había ni rastro de mi castillo. Algún jugador había aprovechado que mis dominios estaban desprotegidos para destruirlo absolutamente todo, y eso que insisto en que me encontraba en un server que no era PvP (ya sabéis que hay jugadores que no respetan nada). Por cierto, la construcción es muy chula conforme se avanza.

Transformaciones, buen combate y un juego que no parece un acceso anticipado

Pero más allá de esta experiencia negativa, sí que os confirmo que jugar de forma multijugador (y a ser posible cooperativa con amigos), es genial y divertidísimo. El videojuego está pensado 100% para el online, aunque podéis jugar en solitario alojando un servidor privado. Vais a pasarlo bien también y he jugado varias horas así, pero cuando he estado con otras personas ha sido mejor. De hecho, el avance es más llevadero así, porque algunos jefes son realmente complicados.

Y hablando de jefes, una de los aspectos que más me ha gustado ha sido el combate. Sí, es fácil pensar en Diablo para entender cómo es, pero a mí me salía compararlo más con Lost Ark (porque lo tengo reciente, vaya). No es tan loco como el del MMO, pero es muy entretenido, con una combinación interesante entre el cuerpo a cuerpo y las habilidades del vampiro, con una muy variedad de armas y poderes. Stunlock ya hizo un trabajo fantástico con Battlerite en el combate.

Por cierto, una de las cosas que más me ha gustado son las transformaciones. Al acabar con los jefes (portadores de sangre V, que es como realmente se llaman), podemos conseguir ciertas habilidades de transformación, lo que aún da mayor variedad al gameplay; por citar dos, ¿os apetece ser un lobo o un murciélago? Pues tenéis que jugar a V Rising.

Juega en cooperativo con amigos para derrotar a esos jefes finales tan exigentes

Aún así, el juego para mí tiene algunos peros. Para empezar, los requisitos me han parecido excesivos porque no creo que lo que se ve en pantalla sea para tanto. El juego es chulo, por supuesto que sí, pero no tiene unos gráficos punteros. Los recomendados sitúan la gráfica en una 1070 y yo con una 1070Ti tengo que poner el juego a 1080p y 60 FPS para que la temperatura de la gráfica no se dispare a niveles preocupantes (también es cierto que el calor de estos días no ayuda).

Que no pueda limitar los FPS a 30 o que bajar la configuración gráfica no impacte demasiado en el rendimiento no me ha gustado. Ojo, el juego tiene un rendimiento buenísimo para ser un early access y solo he visto un par de bugs tontos, pero creo que puede mejorar en optimización.

He echado en falta también que se pueda jugar con mando (aunque con una configuración en Steam es posible hacerlo) y el manejo de la cámara no ayuda a veces en situaciones de estrés, aunque tampoco es una cuestión dramática. Eso sí, lo peor de todo es que no se pueda llevar nuestro personaje de un servidor a otro y que tengamos que comernos el tutorial cada vez que empezamos una partida nueva, por no hablar de que el mapa siempre es el mismo y eso quita parte de la gracia.

V Rising ha salido en acceso anticipado como si fuera un videojuego acabado y es una experiencia altamente recomendable. Los números hablan por sí solos, con más de 100.000 jugadores simultáneos en Steam de forma habitual y más de un millón de copias vendidas desde que salió. Sí, yo también estoy enganchado y os lo recomiendo totalmente. Si Stunlock escucha a la comunidad y el juego avanza en la dirección correcta, podemos estar ante uno de los grandes videojuegos del género de la supervivencia.

- Publicidad -
Comparte este artículo
Periodista especializado en videojuegos y especialista en marketing digital. Los videojuegos me enamoraron siendo un niño, he trabajado con ellos a tiempo completo y ahora sigo en varios medios colaborando todo lo que puedo. Juego a todo en cualquier parte, sin importar la plataforma.
Deja tu comentario